TASCA PEPE.
Avd del Doctor Fleming, 11 03698 AGOST-Alicante
telef 696 467 175
Pueblo situado a 18 Km de Alicante. El núcleo mas antiguo está en la parte alta del cerro por donde se distribuye el pueblo y es de época IBERA (esfinge de Agost). También hay yacimientos de época romana. Pero fue con los árabes cuando alcanzó gran desarrollo gracias a los yacimientos de arcilla, dando lugar a una importante artesanía alfarera.
Con la conquista cristiana perteneció al Reino de Castilla (Fernando III), después en 1296 con Jaime II de Aragón pasó al de Valencia.En 1681 pasó a propiedad de los caballeros de Vallebrera. Se segregó de Alicante, término al que pertenecía desde 1252, a finales del siglo XVIII.
MONUMENTOS
-Iglesia de San Pedro Apóstol (XVI)
-Ermita de las Santas Justa y Rufina (1821) patronas de la alfarería.
-Castillo de Agost (sólo queda un lienzo)
-Ermita de San Pedro (junto al castillo)
-Castillo de la Murta, a 7 km del pueblo (restos)
Hoy en día es muy visitada por la RUTA VERDE.
Es un local reformado, regentado por pepe Jover, antes regentaba el restaurante de La Escandella. Con una decoración muy del día y buena luminosidad.
Entre otras cosas, lo tìpico de este local spon las cocas a la pala.
COCAS A LA PALA. Precio por persona 7, 50 €
-Coca a la pala
-Plato de fiambre y salazón
-cacahuetes, habas, aceitunas, ditets (dependiendo de la estación)
-Bebida
-Café.
Todos los dias en este restaurante, sirven unos almuerzos típicos en la zona.
Coca a la pala o también llamadas coquetes, hechas con masa de pan sin levadura.
Las sirven calientes hechas al momento, acompañadas de un buen plato de fiambres y salazones (este plato es para dos personas).
La forma de tomarlas es como cada uno quiera y le apetezca, poniendo encima el tomate rallado o la mayonesa con ajo o ambas cosas, regado con generoso chorro de aceite de oliva y encima ir poniendo los fiambres o salazones que apetezcan y gusten.
De acompañamiento se sirven unas olivas caseras con ditets (guindilla) picantes, unos cacahuetes o unas habas frescas según la época.
Es lugar de reunión de muchos trabajadores de los alrededores, así como de ciclistas que salen los sábados en pelotón a pedalear por la zona y reponer fuerzas.
Es un almuerzo contundente, de muy buen comer y que invita a la conversación alegre y desenfadada de un día de descanso para compartir con amigos.
El trato por parte del personal es amable y rápido.