viernes, 1 de noviembre de 2013

BALCÓN DEL ADARVE- Priego de Córdoba

Mesón Restaurante BALCÓN DEL ADARVE
Paseo de Colombia, 36
14800 Priego de Córdoba- Córdoba
telef:   957 54 70 75
www. balcóndeladarve.com

Asomado a la vega del río Salado, a la Sierra del Albayate y rodeado de olivos en un otero, se alza Priego de Córdoba. Sita entre Córdoba y Granada.
Desde el Paleolítico Medio ( Musteriense) existen restos. Los romanos también dejaron su huella. Los árabes en el siglo IX la llamaban Medina Baguh. En 1341 Alfonso XI la conquista después de varios intentos.
En 1501, los Reyes Católicos nombran el 1º Marques de Priego a D. Pedro Fernandez de Córdoba. Empieza su periodo de auge, se construyen varios monumentos como el Cabildo, Cárcel, Carnicerías Reales, Iglesia de San Esteban hoy de San Francisco.
En 1881, Alfonso XII le concede el titulo de Ciudad.
Visitables, son : Castillo, Carnicerías, Ayuntamiento, Iglesia Asunción, Iglesia de la Aurora, Fuentes del Rey y de la Salud y algunas cosas más.




Haciendo esquina del Paseo de Colombia y el Adarve, se encuentra el Mesón Restaurante Balcón del Adarve. Es un local que tienes que bajar con escalera o ascensor. Entras al mesón o al restaurante y si el tiempo lo permite, debes comer en el balcón, tiene muy buenas vistas. 
Estuvimos muy bien atendidos y servidos.

El servicio de mesa era original, sobre todo la aceitera (una botella de aceite de la zona),Claudium. Aguas, cervezas y una botella de Resalso 2012, de Emilio Moro. Un vino joven pero con mucha promesa. Rojo granate con ribetes violáceos. En nariz, dominan los frutos negros con algo de madera. Muy buena relación calidad-precio.



Empezamos con unas berenjenas con miel de caña (típico), un hojaldre al queso de cabra (original) y revuelto de collejas, crujientes de jamón y gambas (típico) y exquisito. No fui lo bastante rápido y pesque los platos empezados.




Seguimos atacando un bacalao con aceite de oliva y salsa de piquillos, ternera en salsa y Rabo de toro a la cordobesa (demasiado).




Y para acabar, los postres. Leche frita, carne de membrillo con nueces y queso Zuheros y por último un derretido de chocolate caliente. Salimos a 25.-€ por cabeza.



Muy buena la experiencia de la ciudad y del restaurante. Volveré.